Karim Adeyemi, delantero del Borussia Dortmund, ha sido multado con 450.000 euros por posesión ilegal de armas. La investigación reveló que en su vivienda se encontraba un puño americano y un dispositivo eléctrico tipo táser, ambos clasificados como armas prohibidas en Alemania.
El caso se resolvió a través de un Strafbefehl, un procedimiento que permite cerrar el asunto sin juicio público siempre que el acusado acepte la sanción. La multa corresponde a 60 cuotas diarias de 7.500 euros, calculadas en función de sus ingresos, y aunque queda registrada, no se considera un antecedente penal.
La versión del entorno y el papel de tiktok
Adeyemi no ha dado declaraciones públicas, pero su entorno sí ha intentado matizar lo ocurrido. Su abogado y su agente han explicado que las armas habrían llegado a sus manos a través de una “Mystery Box” comprada en TikTok, un paquete sorpresa adquirido online en el que supuestamente venían estos objetos.
Más allá de esa explicación, la justicia ha dejado claro que, independientemente del origen, lo sancionable es la posesión de armas prohibidas. Ese es el punto que ha llevado al futbolista a recibir una de las multas más altas que se recuerdan para un jugador de élite por un asunto de este tipo.
La postura del dortmund y el impacto en su futuro
El Borussia Dortmund reaccionó con un comunicado breve, asegurando que trata el caso con “máxima seriedad”, sin detallar posibles medidas disciplinarias. Adeyemi continúa entrenando y disponible para el equipo, pero el episodio afecta directamente a su imagen en Alemania, donde se esperaba que fuera una pieza importante del nuevo ciclo de la selección.
A nivel deportivo, el jugador ya venía atravesando un momento irregular y su continuidad en el Dortmund había sido cuestionada incluso antes del incidente. Esta sanción añade más presión y abre dudas sobre cómo afectará a su futuro inmediato, tanto en el club como a nivel internacional.
