El FC Barcelona todavía no ha recuperado a una de sus piezas más valiosas. Tras varios días de trabajo intensivo en la Ciutat Deportiva Joan Gamper, Lamine Yamal se vuelve a caer de una convocatoria oficial del primer equipo y apunta a que el próximo compromiso liguero tampoco estará disponible. El extremo de Rocafonda, que arrastraba molestias en el pubis, ha completado un exigente plan de recuperación que lo devuelve a la dinámica competitiva antes de lo previsto, pero sin llegar a estar al 100%.
Lamine se ha ejercitado de manera casi obsesiva en Sant Joan Despí. El joven atacante ha pasado largas jornadas en el gimnasio y sobre el césped bajo la supervisión de los fisioterapeutas, en sesiones que superaban con frecuencia las cuatro horas de trabajo. Este esfuerzo extra refleja su compromiso por acortar plazos y regresar cuanto antes para ayudar al equipo, en un inicio de temporada donde las bajas han condicionado los planes del cuerpo técnico.
Respaldo de Laporta a Flick
La situación del jugador también ha generado eco en los despachos del FC Barcelona. El presidente Joan Laporta ha reiterado su apoyo a Flick después de que el técnico culé criticara la gestión de Luis de la Fuente en la Selección Española. “Nuestro entrenador ya dijo lo que tenía que decir y tiene toda la razón”, señaló el dirigente antes del choque de Champions en Newcastle. En paralelo, el vicepresidente Rafa Yuste expresó sus mejores deseos: “Lo importante es que Lamine se recupere bien; lo demás lo lleva Deco”.
Mirando al futuro inmediato
Aunque su presencia frente al Real Oviedo el próximo 25 de septiembre aún no está garantizada, la previsión del cuerpo técnico es que pueda acumular minutos antes del esperado duelo de Champions contra el Paris Saint-Germain. La idea es que Lamine llegue rodado a una cita clave en el calendario europeo.
Junto a él también avanzan en su recuperación Alejandro Balde y Gavi, este último pendiente de decidir en los próximos días si sigue un tratamiento conservador o si finalmente pasa por el quirófano. En cualquier caso, la reaparición de Lamine Yamal supone una inyección de ilusión para el barcelonismo, que espera volver a disfrutar cuanto antes del talento más prometedor salido de La Masia en los últimos años.
