La llegada de Claudio Echeverri al Girona FC ya es un hecho. El futbolista argentino jugará en el conjunto de Montilivi a partir del 1 de enero tras alcanzarse un acuerdo de cesión con el Manchester City, tal y como ha adelantado Fabrizio Romano con su ya característico “Here we go”. El movimiento se produce después de la interrupción anticipada de su préstamo en el Bayer Leverkusen, donde el joven talento apenas ha contado con minutos.
Etapa en Alemania
El centrocampista pone así fin a una etapa en Alemania que no ha cumplido con las expectativas ni del jugador ni de su entorno. Su escasa participación ha sido determinante para que el City Football Group decidiera reubicarle en un contexto más favorable para su desarrollo, priorizando un destino donde pueda tener continuidad y protagonismo real sobre el césped.
Girona como destino
El Girona aparece como el escenario ideal dentro de esa planificación. El club catalán llevaba tiempo siguiendo de cerca la situación de Echeverri y, esta vez sí, la operación ha llegado a buen puerto. A partir del 1 de enero, el argentino se incorporará a la dinámica del equipo dirigido por Míchel, con el objetivo de aportar talento, creatividad y desequilibrio en el último tercio del campo.
Desde el entorno del jugador se asume que esta cesión representa una oportunidad clave para adaptarse al fútbol europeo en una liga exigente como LaLiga, pero en un ecosistema más propicio que el vivido en el Leverkusen. El Girona, por su parte, refuerza su plantilla con un futbolista joven, de enorme proyección y con margen de crecimiento inmediato.
Salvo contratiempo de última hora, Echeverri vestirá la camiseta rojiblanca desde el arranque del nuevo año, en una operación estratégica tanto para el City como para el propio jugador, que busca relanzar su carrera con minutos y confianza. El mercado de invierno arranca con un golpe de efecto en Montilivi.






