Los leones se estrenan en San Mamés. El equipo de Ernesto Valverde consiguió inaugurar su casillero de puntos en la UEFA Champions League tras vencer por 3-1 al Qarabag en San Mamés. El equipo necesitaba conseguir la victoria si no quería que la clasificación a la siguiente ronda se postulase como una opción inverosímil.
El rendimiento de los vizcaínos hasta ese momento en la competición había sido malo. En los dos primeros partidos, sumaban dos derrotas frente al Arsenal en San Mamés y contra el Borussia Dortmund en Alemania.
La mala dinámica del equipo se expandía de la competición continental y los síntomas del mal arranque de curso trascendían de la Champions. Desde la pretemporada, el equipo de Ernesto Valverde no ha conseguido trasladar las buenas sensaciones dejadas el año pasado en cuanto a físico ni juego. Más allá de momentos en partidos concretos, no habían logrado completar un encuentro redondo donde los rojiblancos hubiesen tenido un dominio y su seña de identidad.
El Qarabag, un punto de inflexión para el Athletic
Sin embargo, ayer en San Mamés los leones volvieron a navegar a todo motor junto con el empuje de su afición. El partido comenzó de la peor manera posible. En el primer minuto de juego, tras un saque de banda en zona ofensiva Azerí, una falta de comunicación entre los centrales Paredes y Laporte ocasionó un rebote que dejaba mano a mano al delantero Andrade que batía a Unai Simón con un disparo cruzado.
A partir de ahí el partido fue un monólogo. El Athletic embistió a un Qarabag que demostró ser un equipos frágil a nivel defensivo. Los leones remataron un total de 21 veces al equipo dirigido por Gurban Gurbanov que no conseguía poner el tapón a los ataques bilbaínos más allá de con pérdidas de tiempo.
El paso de los minutos parecía ser el peor enemigo del Athletic. La necesidad de la victoria era imperiosa y por momentos los jugadores de ataque parecían pasados de revoluciones y los últimos contactos no eran precisos. Además, en el minuto 35 el capitán Iñaki Williams tuvo que ser sustituido tras sentir un pinchazo en su musculatura aductora.
Cerca del descanso el ariete Gorka Guruzeta logró perforar la portería azerí con un remate de zurda previo a un pase exquisito de Jauregizar, qué volvió a enamorar a los athleticzales. El gol supuso un punto de inflexión y liberación para el equipo que consiguió elaborar jugadas de manera más pausada.
En el segundo tiempo el guion del encuentro fue similar. Los leones llegaban por oleadas, aunque el gol parecía resistirse. Nico Williams acusó su inactividad durante el segundo periodo, y el joven atacante no consiguió zafarse de los defensas ni mostrar su chispa habitual que lo convierten en un jugador diferencial.
En el minuto 65 Robert Navarro entró al encuentro sustituyendo al nombrado Nico Williams. El recién llegado es sin duda una de las notas positivas del Athletic en este comienzo de temporada, y ayer volvió a ser diferencial.
Robert Navarro puso la ventaja con una obra de arte
Cinco minutos después de su ingreso recibió un pase de Berenguer en el pico izquierdo del área grande, que tras un control perfecto logró un disparo con el empeine-interior de su bota derecha que se introdujo en la portería por la escuadra del palo largo. El gol enloqueció a los más de 50.000 aficionados que llenaban San Mamés y permitió a los locales terminar el partido defendiéndose con la pelota.
Ya en el tramo final, Guruzeta, el hombre del partido, puso la guinda al partido con el cuarto gol de la tarde. El guipuzcoano cerró la victoria con un remate de volea precioso desde la frontal del área. El jugador es el pichichi actual del equipo, con tres goles en la competición, y sin duda uno de los llamados a mejorar el momento ofensivo del Athletic que hasta ayer era sumamente pobre.
La victoria permite sumar los primeros tres puntos en la fase regular de liga de la Champions League. Tras las tres primeras jornadas el equipo se ubica en la posición 21. El próximo reto europeo será en Inglaterra, frente al poderoso Newcastle de la Premier League.
Los leones tienen un calendario muy exigente en la competición, teniendo que enfrentarse también a Atalanta, PSG, Slavia de Praga y Sporting de Portugal. De todos modos, el triunfo y las sensaciones dejadas anoche hacen soñar tanto a afición como equipo que ya piensan en sumar los puntos correspondientes para sellar su clasificación a la siguiente ronda.
