“El futbol es emoción”, declaró Hansi Flick sobre su celebración tras el gol de la victoria del Barça ante el Girona. El conjunto blaugrana sufrió. Probablemente, más de lo que todo el mundo se esperaba. El corte de mangas del entrenador culé es la viva imagen de un equipo que padeció ante su rival, pero que al final consiguió los tres puntos. Una victoria que le pone líder, momentáneamente, y mete presión a su contrincante de la semana que viene, el Real Madrid. El clásico, un partido que jugará el Barça sin Flick en el banquillo.
Corría el minuto 93 cuando la montaña de Montjuic hizo su magia y Araujo, de delantero centro, anotó el 2-1 definitivo ante el Girona. La euforia estalló entre todos los blaugranas. Y entre ellos, Flick. El entrenador alemán saltó al campo como nunca se le había visto haciendo un corte de mangas, que se repitió dos veces. Un gesto que sorprendió a todos, porque Flick ya estaba expulsado por protestar a Gil Manzano, árbitro del encuentro.
“Hoy hemos ganado gastando mucha energía, más de lo que esperábamos. Al final se trata de eso: emoción pura. Marcar ese gol fue fantástico”, expresó Flick en rueda de prensa. Además, quiso argumentar su celebración: “No iba dirigida a nadie, fue simplemente una expresión de tensión, de la manera en que se vive un partido tan intenso”.
Flick, a la grada contra el Madrid
Gil Manzano no titubeó y en el minuto 91 expulsó a Flick. Todo parecía indicar que era por protestar, pero el técnico alemán se defendió en rueda de prensa. “Yo estaba aplaudiendo a Frenkie. Intenté hablar con el árbitro, pero él no quiso dirigirse a mí”, argumentó Flick. Una roja que no permitirá al técnico blaugrana estar con su equipo en banquillo en el clásico de la semana que viene ante el Real Madrid.
De esta manera, Flick se perderá su primer clásico en su segunda temporada como entrenador del Barça. “Me duele no poder estar al lado del equipo“, confesó el técnico alemán. Los datos de la temporada pasada fueron abrumadores. Flick debutó contra el Madrid con victoria 0-4 en liga en el Santiago Bernabéu. A partir de ahí, llegaron otros tres triunfos más ante el máximo rival. Una en Supercopa de España, en la final de la Copa del Rey y en el partido de la segunda vuelta de La Liga en Montjuic. Cuatro enfrentamientos, cuatro victorias. En el primer clásico de su segunda temporada, Flick verá los toros desde la barrera en el Bernabéu. Si sigue la racha o no es otro capítulo que se tendrá que hablar el domingo que viene.
