El FC Barcelona viaja a Bélgica con la obligación de mantener el pulso en la Champions League y confirmar las buenas sensaciones recuperadas tras su victoria ante el Elche. Sin embargo, el equipo de Hansi Flick afronta el encuentro ante el Brujas (miércoles, 21:00 h) con varios riesgos sobre la mesa, tanto en lo deportivo como en lo disciplinario.
El primero de ellos está en el centro del campo, donde el conjunto azulgrana llega bajo mínimos. Con Pedri lesionado, baja segura para al menos tres semanas, y con Marc Bernal todavía lejos de su mejor ritmo tras más de un año fuera por una grave lesión de rodilla, Flick volverá a apostar por la dupla formada por Frenkie de Jong y Marc Casadó. Los dos serán piezas clave para controlar un partido exigente ante un rival combativo, pero también encarnan el segundo riesgo que afronta el Barça en Brujas: ambos están apercibidos de sanción.
Stamford Bridge en el punto de mira
Una tarjeta amarilla para cualquiera de los dos supondría perderse el próximo compromiso europeo ante el Chelsea, el 25 de octubre en Stamford Bridge, uno de los partidos más importantes de la fase de grupos. La posibilidad de quedarse sin sus dos pivotes naturales preocupa al cuerpo técnico, que deberá equilibrar la necesidad de competir con la precaución de evitar una sanción que podría dejar al equipo en cuadro en Londres.
El técnico alemán confía en que sus jugadores gestionen bien la situación y mantengan la disciplina en un choque en el que el Barça buscará afianzar su liderato del grupo. El duelo ante el Brujas no solo pondrá a prueba la solidez del equipo, sino también su madurez para sobreponerse a las bajas y resistir la presión europea sin pagar un precio demasiado alto.
