El FC Barcelona volvió a dar una muestra de carácter el pasado sábado en su visita al Ciutat de Valencia tras imponerse al Levante con una remontada que quedará para la historia. El conjunto azulgrana se marchó al descanso con un 0-2 en contra, pero logró darle la vuelta al marcador en la segunda mitad, firmando una victoria inédita en el siglo XXI en partidos de LaLiga.
El triunfo no solo supuso tres puntos vitales para el equipo de Hansi Flick, sino que también rompió una estadística negativa que pesaba sobre los culés durante más de dos décadas, nunca antes habían remontado con victoria en la competición doméstica tras ir perdiendo por dos goles al descanso.
Con Pedri empezó todo
El partido cambió por completo en la segunda parte gracias a la energía y determinación de los jugadores más jóvenes de la plantilla. Cuando más lo necesitaba, apareció el mago canario para iniciar la remontada. Acto seguido, el segundo fue del pichichi en lo que va de liga del Barça, Ferran Torres, quien sigue de dulce y lanza un mensaje a sus rivales: Quiero ser el delantero titular del FC Barcelona.
Para cerrar una remontada histórica, centro lateral del de siempre, Lamine Yamal. con la mala fortuna de que el remate lo desvía Unai Ergezabal hacia su propia portería, con este gol, el conjunto catalán remontaba un partido que temía su derrota al descanso del encuentro.
Un triunfo que puede marcar el camino
Más allá de los tres puntos, la victoria ante el Levante tiene un valor simbólico. El Barça demostró que, incluso en situaciones límite, tiene la fortaleza mental y el hambre competitivo necesarios para revertir escenarios adversos.
En un equipo donde conviven jóvenes talentos y jugadores experimentados, esta remontada puede convertirse en un punto de inflexión para la temporada. El vestuario celebró el triunfo como un impulso de confianza de cara a los próximos compromisos de LaLiga.
