España vuelve a la cima del fútbol mundial. La Selección regresa al número 1 del ranking FIFA por primera vez desde junio de 2014, cuando aún resonaban los ecos de la etapa dorada que la llevó a conquistar la Eurocopa 2008, el Mundial 2010 y la Eurocopa 2012. Once años después, La Roja vuelve a mirar a todos desde arriba.
El ascenso ha sido histórico. La derrota de Argentina ante Ecuador en la última jornada de clasificación sudamericana para el Mundial 2026, combinada con la victoria de España ante Turquía, ha provocado el intercambio en la tabla. Francia se mantiene segunda, mientras que la Albiceleste de Scaloni cae a la tercera posición tras más de dos años y medio de dominio.
Luis de la Fuente, el guía de esta selección
El trabajo de Luis de la Fuente ha sido determinante. Cuando asumió el cargo en diciembre de 2022, España ocupaba el décimo puesto del ranking y llegaba tocada tras caer en octavos de final del Mundial de Qatar frente a Marruecos. Dos años y medio después, su proyecto ha devuelto la ilusión y la regularidad, una Eurocopa conquistada en 2024 y un subcampeonato en la Nations League 2025.
Con los últimos triunfos frente a Bulgaria y Turquía, España alcanza los 1.875 puntos, superando a Francia (1.870) y Argentina (1.870). El margen es mínimo, lo que augura una pugna vibrante por el trono mundial en este parón internacional. Esta semana, La Roja se medirá a Georgia y Bulgaria, los franceses jugarán ante Azerbaiyán e Islandia, y Argentina disputará amistosos frente a Venezuela y Puerto Rico.
La maldición del ranking FIFA
La historia, sin embargo, invita a la prudencia. Ninguna selección que ha llegado al Mundial como líder del ranking FIFA ha conseguido después proclamarse campeona. Le ocurrió precisamente a la España de Vicente del Bosque en 2014, que viajó a Brasil como número uno y cayó en la fase de grupos.
Aun así, el regreso de España a lo más alto simboliza mucho más que una estadística: representa el renacimiento de un proyecto que ha recuperado la esencia del toque, la competitividad y la confianza. Once años después, La Roja vuelve a mandar en el mundo.
