Jude Bellingham no ha firmado la temporada que se esperaba, el inglés se ha ido diluyendo con el paso de los meses. En el Real Madrid hay preocupación. Según informa Marca, el club ha mantenido charlas recientes con el jugador para pedirle un cambio de actitud y mayor implicación en el tramo final del curso. Incluso Carlo Ancelotti se ha interesado personalmente por el estado anímico del futbolista, inquieto por su lenguaje corporal sobre el césped, sus constantes protestas y su participación limitada en los momentos clave.
A sus 21 años, Bellingham llegó al Madrid para liderar una nueva generación, y comenzó cumpliendo con creces, goles, asistencias y carácter. Sin embargo, su rendimiento ha bajado notablemente en la segunda mitad de la temporada. El club entiende que las lesiones, el cambio de posición más alejado del área por la ausencia de Kroos y el desgaste general han podido afectar su rendimiento. Pero también cree que es momento de exigirle más. En el vestuario no se le ve feliz ni conectado, y esa desconexión se ha reflejado en el campo.
Las cifras no salvan las sensaciones
Estadísticamente, la campaña de Bellingham no es mala. Ha disputado 51 partidos, con un balance de 14 goles y 14 asistencias, participando en 28 tantos. Pero esas cifras palidecen frente a las expectativas generadas y a sus propios registros del curso pasado, cuando sumó 37 contribuciones ofensivas. El contraste es claro, sobre todo en partidos importantes. En los cuatro Clásicos, en los derbis o frente al Arsenal, Bellingham no ha logrado marcar diferencias. En el último enfrentamiento ante el Barça, Frenkie de Jong le superó claramente, y el inglés apenas tuvo peso defensivo ni ofensivo.
En el club reconocen su juventud y su potencial, pero también saben que la camiseta del Real Madrid exige rendimiento inmediato y liderazgo en los momentos grandes. Bellingham tiene talento de sobra, pero necesita reenfocarse para volver a ser el jugador determinante que deslumbró en el arranque de temporada. La entidad blanca mantiene su confianza intacta, pero el toque de atención ya ha sido dado.
El Mundial de Clubes, una última oportunidad
La temporada aún no ha terminado. Al Real Madrid le queda por disputar el nuevo Mundial de Clubes, y el torneo podría ser la ocasión perfecta para que Bellingham recupere sensaciones y cierre el año con un título y mejores sensaciones. Porque, aunque ha dejado momentos de calidad, el club quiere más. Jude está llamado a marcar una época en el Bernabéu, pero debe empezar a demostrarlo ya.
