La selección francesa se prepara para afrontar dos encuentros decisivos de las eliminatorias europeas para el Mundial 2026, que se disputará el próximo verano y tendrá como sedes Canadá, México y Estados Unidos.
La primera prueba de los galos llegará este viernes 10 de octubre, a partir de las 20:45 (hora peninsular), ante Azerbaiyán en el Parque de los Príncipes, y el segundo duelo será ante Islandia, 72 horas más tarde y a casi 4.000 kilómetros, en el estadio Laugardalsvöllur, en Reikiavik.
Ambos enfrentamientos corresponden al Grupo D de la UEFA, donde Francia es líder en solitario, con 6/6 puntos posibles.
Lista de convocados
Para hacer frente a estos partidos, Didier Deschamps ha optado por una plantilla que combine experiencia y juventud. En ella destacan principalmente Eduardo Camavinga, quien ha superado recientemente una lesión en el tobillo que lo mantuvo apartado de los terrenos de juego durante casi cinco meses, y Jean-Philippe Mateta, que se estrena en una convocatoria absoluta a sus 28 años.
Sin embargo, la lista también presenta ausencias significativas. Por ejemplo, Aurélien Tchouaméni no estará disponible debido a una suspensión por acumulación de tarjetas amarillas, y Ousmane Dembélé, el reciente Balón de Oro, se pierde la convocatoria por una lesión en el muslo.
La situación de su gran estrella, Kylian Mbappé
La gran incógnita de la selección gala recae sobre su capitán y máxima estrella, Kylian Mbappé. El delantero del Real Madrid sufrió una leve torcedura en el tobillo derecho durante el partido del pasado sábado ante el Villarreal y, durante estos primeros días, no se ha ejercitado con el grupo.
Sin embargo, Deschamps ha asegurado que no es nada grave y que, por eso, ha sido convocado. Aún así, su presencia en el primer encuentro ante Azerbaiyán se antoja cada vez más complicada, al menos dentro del once inicial.
Objetivo claro
El principal objetivo de la selección francesa en este segundo parón de la temporada es consolidar su liderato en el Grupo D y dejar la clasificación al Mundial prácticamente encarrilada.
Además, estos duelos dan a los galos la posibilidad de continuar ajustando el engranaje de piezas tan valiosas y evolucionando su ritmo de competición.
