Gavi otra vez frenado por la rodilla. La historia se repite. El de los Palacios, que había vuelto a sonreír tras meses de calvario por la rotura de ligamento cruzado, vuelve a sentir el zarpazo de la rodilla. Esta vez no es el ligamento, sino el menisco derecho, el que vuelve a ponerle freno. El mediocampista se resintió en los últimos entrenamientos y encendió todas las alarmas en el cuerpo técnico. El recuerdo de su larga ausencia la pasada temporada pesaba como una losa. El Barça no tardó en actuar: pruebas médicas, consultas con especialistas y un debate interno sobre el camino a seguir. Gavi, otra vez frenado por la rodilla
¿Pasar por quirófano o no?
La decisión fue clara: nada de bisturí, al menos por ahora. Los médicos han apostado por un plan conservador, basado en reposo, fisioterapia y un trabajo progresivo de fortalecimiento. El calendario de regreso marca unas tres semanas de baja, siempre condicionado a la evolución del jugador. En el club respiran aliviados. Una operación habría supuesto varios meses fuera, justo cuando Gavi empezaba a recuperar su mejor versión. Pero la prudencia manda: si el dolor no cede, la cirugía volverá a aparecer en el horizonte.
Mientras tanto, el equipo de Hansi Flick deberá aprender a vivir otra vez sin su pulmón en el centro del campo. Valencia, Newcastle y Getafe se asoman en el calendario sin el de Los Palacios, ese futbolista que multiplica esfuerzos y contagia energía. Gavi, que nunca se rinde, ya ha comenzado la cuenta atrás. Tres semanas parecen poco en comparación con lo vivido el curso pasado, pero cada día sin pisar el césped pesa doble en un jugador cuya vida solo tiene sentido en el balón.
Después de todo el revuelo que se ha creado sobre su lesión, el andaluz ha aparecido públicamente en el campeonato de MotoGP junto a la leyenda blaugrana Carles Puyol.
