El Fútbol Club Barcelona regresó a la Ciudad Condal con un valioso triunfo tras imponerse 1-4 al Sevilla en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Los de Hansi Flick aprovecharon el empate entre Real Madrid y Atlético de Madrid para recortar distancias en la lucha por LaLiga. Sin embargo, más allá del resultado, el partido dejó un debate encendido sobre la actuación arbitral. La expulsión de Fermín López tras una dura entrada sobre Djibril Sow ha traído polémica. En un contexto donde las quejas arbitrales han ido en aumento con el comunicado del Real Madrid, el Barça tampoco se ha cortado. Pedri y Gavi se cansan del arbitraje y consideran que tiene motivos para protestar por la decisión de Hernández Hernández.
Si bien la acción de Fermín fue agresiva y peligrosa, en el club azulgrana creen que la tarjeta roja fue excesiva, pero la protesta va más dirigida a la disparidad de criterios. El árbitro interpretó que la entrada puso en riesgo la integridad del rival y optó por la expulsión directa. Por otro lado, Gavi fue sustituido al descanso por precaución, ya que tenía una tarjeta amarilla.
Gavi: “”El partido estaba muy intenso y el míster y yo decidimos que era lo mejor para el equipo”
Gavi: “No se cortan ni una conmigo”
Pedri cuestiona el criterio arbitral
Pedri no dejó pasar la oportunidad de expresar su descontento con el arbitraje. El jugador del Barcelona ha sido protagonista de varias jugadas en las que, siguiendo la misma vara de medir utilizada en otras decisiones, el rival debió ser expulsado, pero no lo fue. El caso más reciente ocurrió en el duelo de Copa del Rey contra el Valencia, cuando Hugo Guillamón le pisó con los tacos por encima del tobillo sin recibir la tarjeta roja.
El mediocampista canario fue muy contundente y recordó la entrada que sufrió contra el Valencia.
Pedri: “Hablé con el árbitro y le recordé que en otras ocasiones me han hecho entradas muy fuertes y no han sacado la roja. No se entiende por qué el criterio cambia de un partido a otro”
Pedri y Gavi se cansan del arbitraje y echan más leña a un fuego que ya está muy vivo por las malas actuaciones de los colegiados.
