El PSG terminó superando físicamente al Barça y se llevó un triunfo de mucho peso en Montjuïc. El equipo de Hansi Flick empezó mejor, se adelantó en el marcador y tuvo fases de buen juego, pero acabó muy cansado y lo pagó en el añadido con el gol de Gonçalo Ramos, que decidió el partido (1-2).
El Barça salió con intensidad y con un Lamine Yamal muy activo en su duelo con Nuno Mendes. El extremo azulgrana fue el jugador más desequilibrante en la primera parte, buscando el uno contra uno y obligando al lateral portugués a emplearse a fondo. La recompensa llegó pronto: en el minuto 19, una recuperación de Pedri permitió una rápida combinación con Yamal y Rashford, que asistió a Ferran Torres para hacer el 1-0.
Con ventaja en el marcador, el Barça trató de controlar el ritmo, pero el PSG empezó a ganar metros. Pese a sus bajas en ataque, el conjunto parisino aprovechó la potencia de Mendes y las llegadas de sus centrocampistas. Justo antes del descanso, Mayulu apareció libre en el área para rematar el empate tras una buena acción por la izquierda.
El gol dio confianza al Barça, que siguió buscando ampliar la ventaja. Tuvo varias ocasiones claras, algunas de ellas salvadas de forma providencial por la defensa del PSG bajo la misma línea de gol, en especial tras un disparo de Ferran salvado por Zabarny y otro de Yamal que parecían blocado por Achraf. Esas jugadas pudieron cambiar el rumbo del encuentro, pero mantuvieron con vida a los parisinos.
En la segunda mitad el guion cambió. El Barça fue perdiendo frescura y se notó en la circulación del balón. Flick trató de mover el banquillo, pero el equipo ya no tenía la misma energía. Yamal siguió intentándolo contra Mendes, aunque con menos acierto que en el arranque. El PSG, en cambio, se mostró más entero físicamente y supo esperar su momento.
Ese momento llegó en el tiempo de descuento. Con el Barça replegado y defendiendo con más voluntad que piernas, un desajuste en la zaga permitió a Hakimi servir un pase claro a Gonçalo Ramos. El delantero luso no perdonó y firmó el 1-2 que dejó helado a Montjuïc. Con esta derrota, el Barça se queda sin puntos en la clasificación y tendrá que reaccionar pronto si quiere estar en la parte alta del grupo. El PSG suma 3 y toma ventaja en el arranque de la liguilla.
El siguiente compromiso europeo de los azulgrana será el 21 de octubre ante el Olympiacos en el Camp Nou. Un partido clave para sumar la primera victoria. Después, el 5 de noviembre visitará al Club Brugge. Y el 25 de noviembre jugará a domicilio frente al Chelsea, dos salidas muy exigentes en las que el equipo de Hansi Flick no puede permitirse muchos tropiezos si quiere llegar con opciones claras de clasificar entre los ocho primeros.
