El Real Madrid vive un momento de optimismo gracias a la conexión entre Vinícius Jr y Kylian Mbappé. En el reciente duelo contra el Girona, la sociedad entre el brasileño y el francés volvió a brillar, elevando las expectativas de un equipo que se encamina con fuerza hacia el tramo decisivo de la temporada. Este entendimiento en el césped, sumado a la recuperación de figuras clave como David Alaba y la vigencia de veteranos como Luka Modric, posiciona al conjunto de Carlo Ancelotti como un firme aspirante en todas las competiciones.
La estadística respalda el impacto de esta dupla: de los 42 partidos disputados por el Madrid en la presente temporada, Vinicius y Mbappé han coincidido en 31, logrando 22 victorias y 76 goles a favor. Si bien aún persisten dudas sobre cómo encajarían dos jugadores acostumbrados a moverse por la misma zona del ataque, su creciente compenetración han olvidado los temores iniciales. En este encuentro, Mbappé asistió a Vinicius para romper una racha de más de tres meses sin anotar en LaLiga, demostrando que su conexión está cada vez más afinada.
El técnico Carlo Ancelotti no dudó en alabar la actuación de ambos: “Mbappé estuvo muy peligroso y aportó al equipo, aunque no marcó. Vinicius, por su parte, mostró su mejor versión, encarando con confianza y generando peligro constante”. La jugada del gol, fruto de una combinación precisa entre ambos, es un claro ejemplo de lo que pueden lograr juntos.
Luka Modric, un chaval de 39 años
Si bien el dúo Vinícius-Mbappé monopoliza los focos, el Real Madrid se beneficia también de la experiencia de sus ‘viejos rockeros’. Luka Modric sigue siendo una persona importantísima dentro y fuera del vestuario. Ante el Girona hizo un partido completísimo, dejando poco a la vista sus 39 años. Completó 103 de 112 pases, creó seis ocasiones de gol y recorrió más de diez kilómetros, y cerró su tarde con un gol ‘marca de casa’. Su rendimiento alimenta la esperanza de seguir viéndolo brillar, quizás incluso en el próximo Mundial.
Otro que recuperó su sonrisa fue David Alaba, tras 14 meses de ausencia como titular, también dejó buenas sensaciones. En una defensa liderada por Antonio Rüdiger y el emergente Asencio, el regreso del central austríaco supone una alternativa valiosa para Ancelotti, quien sigue apostando por la experiencia en detrimento de los jóvenes.
Sin noticias de los jóvenes
Otros jugadores han quedado relegados a la sombra. El protagonismo de los veteranos a apartado del foco a figuras emergentes como Arda Güler y Endrick. El jugador turco, señalado tras su actuación en Copa frente al Leganés, permanece inédito desde entonces, mientras que Endrick apenas ha tenido minutos residuales en los últimos encuentros. Este contraste entre los consagrados y los noveles refleja la clara estrategia de Ancelotti: confiar en los jugadores que ofrecen garantías inmediatas.
