Santiago Mouriño ya es nuevo jugador del Villarreal. El defensa firmará por cinco temporadas, hasta junio de 2030, y se incorporará de forma inminente a la concentración del equipo en Oviedo. La operación se activó en tiempo récord tras la grave lesión de Logan Costa, que obligó al Villarreal a buscar refuerzos inmediatos para el eje de la zaga.
Mouriño, que venía de realizar una notable campaña con el Deportivo Alavés, era uno de los nombres mejor posicionados en la agenda del club castellonense. El Atlético, que mantenía una opción de recompra sobre el jugador, no dudó en activarla para facilitar el traspaso y asegurarse además un porcentaje de una futura venta.
Ascenso meteórico en España
Mouriño llegó al Atlético en verano de 2023 procedente del Racing Club de Montevideo, en una operación cercana a los 2,7 millones de euros. El club rojiblanco lo cedió al Real Zaragoza. Su rendimiento llamó la atención del Deportivo Alavés, que compró el 50% de sus derechos el verano pasado y le dio continuidad en la máxima categoría: fue titular en 25 partidos de LaLiga, dejando buenas sensaciones por su solidez defensiva y buen juego aéreo.
El rendimiento del uruguayo convenció al Villarreal, que ha decidido apostar fuerte por él. Con 1,86 metros de altura, Mouriño se perfila como un central de futuro en La Cerámica. Su adaptación al fútbol español ,progresiva y constante, con pasos firmes tanto en Segunda como en Primera División.
Perfil completo y proyección
Formado en las categorías inferiores de Nacional, Mouriño no llegó a debutar profesionalmente con el club tricolor, pero sí destacó en Racing de Montevideo, con quien logró el ascenso a Primera División en 2022. Desde su llegada a España, ha demostrado ser un defensor expeditivo, fuerte en los duelos, inteligente en la anticipación y fiable en la salida de balón. Su experiencia en equipos con contextos exigentes como Zaragoza y Alavés le ha servido para madurar y consolidarse.
Operación rentable para el Atlético
La maniobra ha resultado altamente beneficiosa para el Atlético de Madrid, que invirtió menos de 3 millones en su fichaje hace un año y ahora recupera más de 6 millones de beneficio neto, además de reservarse derechos sobre un futuro traspaso. Para el Villarreal, se trata de una inversión estratégica por un defensor joven, con experiencia en LaLiga, y que encaja en el perfil que busca Marcelino para apuntalar su defensa.
Está previsto que el jugador llegue este mismo jueves a Oviedo para incorporarse a los entrenamientos del equipo. El Villarreal disputará allí un triangular ante el Real Oviedo y el Génova como parte de su preparación estival. Posteriormente, viajarán a Leeds para continuar con la pretemporada.
