La noche del miércoles, Independiente y Universidad de Chile protagonizaron incidentes en Avellaneda por los octavos de final de la Copa Sudamericana.
El Rojo de Avellaneda y la U de Chile se enfrentaban por los octavos de final de la competición sudamericana. En el partido de ida los chilenos se habían hecho con la ventaja tras ganar por 1 a 0, por lo que el partido de vuelta los argentinos se veían en la obligación de ganar para quedarse con la serie. Sin embargo, lo que debió ser una revancha emocionante, terminó como una batalla de las más brutales que se han visto en los últimos años dentro de una cancha de fútbol.
¿Qué ocurrió?
El conflicto comenzó cuando la parcialidad chilena le robo una bandera al equipo local. A partir de esa situación, las tensiones empezaron a escalar, y el partido fue detenido en el 48′, con el resultado parcial de 1 a 1. Los hinchas de la U, que casualmente se encontraban en una bandeja superior sin seguridad presente, procedieron a arrojar objetos a los hinchas de Independiente que estaban ubicados por debajo de ellos.
Al presenciar estos hechos, la voz del estadio le solicitó al público visitante que se retiren del club. No satisfechos con lo sucedido, continuaron arrojando piedras, palos, e incluso una bomba de estruendo que habría herido a algunos hinchas del rojo.
El partido estaba detenido y parecía que se iba a reanudar una vez que los hinchas chilenos abandonen el estadio. Según CONMEBOL, habían un total de 650 efectivos policiales, y ninguno tomó la decisión de intervenir ante esta situación.
Luego de varios minutos de inacción y agresión, los propios hinchas de Independiente incitaron a su barra para que tomen justicia por mano propia, a través de cantos como: “Andá a buscarlos, la p… que te parió” y “La barra tiene miedo”.
VIOLENCIA EXTREMA: LOS CHILENOS, DESALOJADOS DEL LIBERTADORES DE AMÉRICA pic.twitter.com/86jowGTAmg
— TyC Sports (@TyCSports) August 21, 2025
Cuando parecía que las cosas se estaban calmando, ya con los hinchas visitantes abandonando el estadio por motus propio, llegó lo peor. La barra del rojo asaltó a los pocos hinchas que quedaban en las tribunas, los golpearon de manera desmedida, los obligaron a desnudarse, y algunos fueron apuñalados. Además, en uno de los videos se ve como un hincha de la U, acorralado, se tira (o lo empujan) al vacío.
Una vez acontecido lo peor, la policía decidió tomar partido y finalmente el terror terminó con represión en las afueras de ambos lados.
Heridos y detenidos
Según varias fuentes, no hubo ningún muerto hasta el momento, aunque si algunos heridos de gravedad que permanecen internados. Se sabe que hubo más de 10 heridos que necesitaron asistencia médica y más de 100 detenidos.
¿Qué dijeron las autoridades de los clubes?
Tanto el presidente de Independiente, Nestor Grindetti, como el presidente de Universidad de Chile, Michael Clark, dieron sus testimonios.
“Todos ustedes vieron lo que pasó, yo creo que no debo hablar de eso todavía, tenemos gente muy grave. Una vez que tengamos claro cómo está toda la gente nuestra, podremos conversar de todo lo que pasó. Todos lo vieron, fue una tragedia. Yo creo que de milagro no hay muertos y ya llegará el momento de ver que pasó y quiénes son los responsables”, declaró Clark en su llegada al Hospital Fiorito para conocer el estado de los 12 heridos que se encuentran en el centro médico.
Por su parte, Grindetti viajó a Asunción de Paraguay para reunirse con la CONMEBOL, y no dudo en señalar como principales responsables a los hinchas chilenos: “desde el primer momento, estos tipos (los fanáticos chilenos) empezaron a hacer lio, y te preguntas cuál pudo haber sido el motivo”. Además agregó: “No voy a venir a defender a los vándalos que entraron al final. El quilombo empezó antes de que entren los hinchas chilenos“.
¿Qué sigue?
Claro está que, en este caso, lo futbolístico pasa a segundo plano, pero no hay dudas que ninguno de los dos clubes seguirá en la competición, y probablemente reciban sanciones que los inhabiliten a jugar la copa el siguiente año. Aunque aún no hay nada resuelto y son muchas especulaciones, este hecho quedará como una nueva marca de vergüenza en el fútbol sudamericano.
Comunicado CONMEBOL.
— CONMEBOL.com (@CONMEBOL) August 21, 2025
