El Inter de Milán ya tiene nuevo comandante para su banquillo, Cristian Chivu será el encargado de liderar al subcampeón de Europa tras la marcha de Simone Inzaghi al fútbol saudí. El técnico rumano firmará por dos temporadas, hasta junio de 2027, en lo que supone un regreso muy especial a un club que conoce desde dentro como jugador y ahora como entrenador.
Chivu, que defendió la camiseta nerazzurra entre 2007 y 2014, vuelve a su casa desde el área técnica. Su experiencia más reciente fue en el Parma, equipo al que salvó del descenso tras asumir en febrero, demostrando temple y visión táctica. Su llegada no es fruto del azar, su conexión emocional con el club, el conocimiento de la estructura interna y su perfil emergente lo convierten en la elección ideal para iniciar un nuevo ciclo.
La alternativa a Cesc
Antes de confirmar a Chivu, el club mantuvo conversaciones con Cesc Fàbregas, actualmente técnico del Como 1907. Sin embargo, el exjugador del Barça y Arsenal decidió seguir centrado en su proyecto personal, dejando vía libre a la opción interista.
El cuerpo técnico de Chivu contará con nombres conocidos, como Mario Cecchi, uno de los responsables tácticos del equipo en la etapa de Inzaghi, lo que garantiza una cierta continuidad en la metodología de trabajo. La elección del exdefensor también responde a una visión de club: potenciar talentos propios, mantener estabilidad y reforzar la identidad nerazzurra.
Del triplete a la reconstrucción
Cristian Chivu fue una figura clave en la época dorada del Inter de Milán bajo las órdenes de José Mourinho, siendo protagonista del histórico triplete de 2010. En total, disputó 169 partidos oficiales, anotó tres goles y dejó una huella profunda en la afición.
Como técnico, se formó en las categorías inferiores del club y es reconocido por su capacidad para conectar con los jóvenes y su enfoque táctico moderno. Su trabajo en el Parma ha llamado la atención, especialmente por su liderazgo en situaciones adversas.
Ahora, con Marotta y Ausilio apostando firmemente por él, la misión es clara: mantener al Inter en la élite europea y competir por todos los títulos. Además, su reciente vínculo con el Parma podría facilitar futuras operaciones, como la de Giovanni Leoni, prometedor central de 18 años con un valor estimado de seis millones.
