Oihan Sancet reúne una serie de características tan singulares que lo hacen ser una especie única en La Liga. Capacidad de giro, entendimiento del juego o la llegada en segunda línea son un simple ejemplo del amplio abanico de posibilidades que el joven jugador posee. Desde su debut en el año 2019, Sancet ha ido mostrándonos sus trucos de manera progresiva. Pero ha sido en su sexta temporada cuando nos ha enseñado su mejor don: el gol.
Ha sido en la temporada 24/25 donde el de Mendillorri ha terminado por abrir el tarro de las esencias que traía en su interior una fiabilidad de cara a puerta extraordinaria. Hasta el momento, “el lince” ha logrado marcar 12 goles en los 20 partidos ligueros que ha disputado. Esta cifra lo sitúa Zarra de la competición por delante de Ayoze y Kike García. En el ranking de pichichis se encuentra en quinta posición.

Influencia en el juego
Sancet brilla en el esquema de Ernesto Valverde que explota todos los registros del jugador. El 4-3-3 del Athletic resalta la figura del media punta. Este jugador es absolutamente vital para el funcionamiento de los leones que ven en la figura del 10 un nexo entre el centro del campo y el ataque. La importancia que el Athletic da a sus bandas en visible. En este proceso, Oihan desempeña a la perfección la labor de agilizar el juego y de lanzar a los Williams al espacio.
Sin embargo, la capacidad que más ha pulido “el lince” en el último lustro es su olfato para detectar las situaciones de gol. La intuición por saber donde llega el balón sumado a la efectividad de cara a puerta hacen que el jugador esté atravesando una dinámica goleadora sensacional. Sumando todas las competiciones 13 goles y 3 asistencias ha conseguido aportar a su equipo el de Mendillorri, siendo ya la 24/25 su mejor temporada a nivel numérico.

Sancet, líder absoluto
Pese a su corta edad (24 años), esta es la sexta temporada de Oihan en la primera plantilla del Athletic Club. A sus espaldas, 182 partidos disputados con el club de sus amores en los que ha conseguido anotar 38 goles y repartir 18 asistencias. Este bagaje lo establece como uno de los líderes naturales del equipo. Su figura está llamada a ser una de las más influyentes de la historia del club. De hecho, Sancet ya tiene una imagen que será recordada para siempre por todos los Athleticzales. Suyo fue el gol del empate en la final de la pasada Copa del Rey frente al Mallorca que el conjunto rojiblanco logró 40 años después. Además, el pasado 2023 el jugador y el club llegaron a un acuerdo y firmó su renovación hasta el año 2032, por lo que hay Sancet para rato.