El dorsal 10 siempre ha tenido un aura especial: es sinónimo de talento, visión y liderazgo. En el Atlético de Madrid, varios jugadores han vestido ese número dejando huella en distintas etapas del club, y ahora, con el posible fichaje de Álex Baena, su legado vuelve al centro del debate.
FUTRE
Uno de los más recordados es, sin duda, Futre. El portugués fue un ídolo indiscutible en el Calderón. Llegó como una joven promesa que venía de brillar en el Oporto, y no tardó en convertirse en un símbolo del Atlético. Su desborde, velocidad y carácter dejaron una huella imborrable. Con el número 10 a la espalda, Futre no solo fue campeón de la Copa del Rey, sino que enamoró a toda una generación.
JOSÉ MARI
Años después, otro nombre resonó con fuerza: José Mari. Aunque su etapa no fue tan brillante como la de otros, su paso con el dorsal 10 coincidió con momentos difíciles para el club. No obstante, su compromiso fue innegable.
JUNINHO Y SIMAO
En la década de los 2000, el brasileño Juninho Paulista trajo esperanza con su clase y visión. Aunque sus problemas físicos limitaron su rendimiento, dejó destellos de calidad que justificaban su dorsal. Otro brasileño que también portó el número fue Simao Sabrosa, aunque habitualmente se le recuerda más por su liderazgo que por ser un clásico «10».
ARDA TURÁN
Uno de los más queridos en la era reciente fue Arda Turan. El turco encajó perfectamente en el esquema de Simeone y llevó el dorsal 10 con jerarquía. Fue parte esencial del equipo que ganó LaLiga en 2014, además de disputar una final de Champions. Su calidad técnica y espíritu combativo lo convirtieron en uno de los jugadores más influyentes del equipo.
ÁNGEL CORREA
No se puede olvidar a Correa, quien en diferentes etapas ha lucido el dorsal 10 y, aunque irregular por momentos, ha demostrado su capacidad de desatascar partidos cerrados y aparecer cuando más se le necesita. Su entrega y versatilidad le han dado un lugar importante en la plantilla.
Otros nombres que completan esta galería son Reyes, con su magia andaluza y un título europeo bajo el brazo, y Óliver Torres, canterano con grandes expectativas que no terminó de consolidarse, pero que dejó detalles interesantes con ese dorsal. También figuran Daniel Carvalho y el francés Benoît Trémoulinas, cuya estancia fue más breve.
Hoy el dorsal 10 del Atlético vuelve a cobrar relevancia. Álex Baena llegará al Metropolitano, y se enfrentará al desafío de mantener viva una tradición que exige algo más que talento. En el Atlético, esa camiseta representa historia, carácter y conexión con la afición. El nuevo «10» no solo tendrá que brillar, sino demostrar que puede estar a la altura de los grandes nombres que lo precedieron.






