Diego Pablo Simeone continúa ajustando su equipo durante la pretemporada y, de cara al amistoso frente al FC Porto prepara un equipo reformado, ya se perfila una alineación base con varios nombres nuevos. En la portería, Jan Oblak parte como titular indiscutible para estos partidos.
La línea defensiva apunta a una configuración de cuatro hombres, con Marcos Llorente actuando como lateral derecho, Robin Le Normand y Clément Lenglet en el eje de la zaga, y Matteo Ruggeri, uno de los refuerzos veraniegos, ocupando el lateral izquierdo.
En el centro del campo, Simeone ha probado un mediocampo dinámico y con proyección ofensiva. Pablo Barrios se está consolidando como el mediocentro posicional, mientras que Giuliano Simeone, en una posición más adelantada, y Álex Baena, uno de los fichajes más destacados del verano, aportan creatividad y movilidad entre líneas. La delantera, por su parte, presenta una combinación de potencia y desequilibrio, con Alexander Sørloth como referencia ofensiva y Julián Álvarez partiendo desde una posición más libre, con tendencia a moverse por todo el frente de ataque.
El esquema, cercano a un 4-3-3, evidencia una intención por parte de Simeone de mantener el equilibrio defensivo característico de sus equipos, pero añadiendo fluidez y capacidad asociativa en campo rival. El técnico argentino ha insistido durante toda la pretemporada en mejorar el remate, el aprovechamiento de los centros laterales y la presión tras pérdida, pilares fundamentales en su idea de juego de cara para la temporada 2025-26.
A pesar de ser un amistoso, el encuentro ante el Porto servirá como termómetro para evaluar el rendimiento de los nuevos fichajes y el grado de asimilación del modelo táctico. Diego Pablo Simeone no ha escondido que la integración de los jóvenes será clave para renovar la energía del equipo sin perder la competitividad que históricamente lo ha caracterizado.
