El Real Madrid se encuentra en una mala racha, registrando uno de sus peores meses en años. Tras el empate frente a CA Osasuna, el arbitraje ha vuelto a acaparar todos los focos, siendo duramente criticado por la opinión pública. En lo que llevamos de mes, el Real Madrid suma 2 victorias, 2 empates y una derrota. De esos partidos, los 3 no favorables son en liga, lo que significa que los de Ancelotti han sumado 2 puntos en los 3 últimos partidos. Estas estadísticas no se recuerdan desde 2020.
El comienzo del desastre
El Real Madrid arrancó el mes con el partido liguero a domicilio frente al RCD Espanyol, donde conocerían la derrota con un solitario 1-0 en el marcador. La polémica nació en este partido, por una falta de Carlos Romero a Mbappé cortando un contraataque, en la que el futbolista perico tan solo vio la cartulina amarilla. Para muchos, esa falta era merecedora de una tarjeta roja clara, pero quedó en anécdota y el partido siguió su curso.
Ya en los últimos compases del enfrentamiento, el propio Carlos Romero sería quien anotaría el gol de la victoria para el equipo catalán. Tras el partido, la televisión del Real Madrid emitió un vídeo denunciando el arbitraje del partido, y pocas horas después, el Real Madrid emitió un comunicado oficial reprimiendo la actuación arbitral.
Una bocanada de aire fresco
Tras el partido ya mencionado frente al Espanyol, el Real Madrid disputó su siguiente encuentro, los cuartos de final de la Copa del Rey frente al Leganés. Con los goles de Modric y Endrick, el partido iría con un empate de 2-2 en el electrónico, hasta que en el minuto 93 del canterano Gonzalo, los blancos certificaron su pase a semifinales al más puro estilo merengue. Esta victoria supuso un borrón y cuenta nueva para la entidad blanca, pero que solo duraría 3 días.
Un derbi con un empate que sabe a poco
El derbi madrileño entre Real Madrid y Atlético de Madrid, partido que podía decidir el transcurso de la presente liga, terminó con un insípido empate 1-1. A pesar del resultado reflejado en el marcador, el partido fue mucho más que un solo empate. Julián Álvarez adelantó al Atlético con un penalti muy criticado de Tchouaméni a Lino, con lo que el árbitro interpretó un pisotón del francés, mientras que los blancos no conseguían entenderlo. Por el otro lado, Kylian Mbappé igualó para el Real Madrid, lo que serviría para rascar un punto del derbi .
El encuentro fue intenso y estratégico, con el Real Madrid dominando gran parte del juego pero sin lograr materializar sus oportunidades. Por su parte, el Atlético se mostró sólido defensivamente y aprovechó sus momentos clave para cosechar situaciones favorables como el penalti sobre Lino. Dicho penalti unido a una falta de Ceballos en la que los rojiblancos pedían tarjeta roja, el arbitraje volvió a ser cuestionado al acabar el partido, pero la repercusión no fue tan grande como en el partido contra el Espanyol.
Con este resultado, el Real Madrid mantenía el liderato de LaLiga con 49 puntos, seguido muy de cerca por el Atlético con 48, pero al día siguiente el Barcelona le endosaba de visita un 1-4 al Sevilla. Esta victoria culé supuso que, desde esa misma noche, el FC Barcelona dependía de sí mismo para ganar la presente liga.
El Real Madrid clavó su bandera en Manchester
Los blancos lograron otra épica remontada contra un viejo conocido. Una vez más, se vivió una noche de ensueño en el que es un nuevo clásico en la Champions League. El Real Madrid tuvo su momento cúspide de lo que llevamos de mes, marcado por el gol en el 93 de Bellingham, firmando de esta manera una épica remontada al Manchester City de Guardiola. El doblete de Haaland no fue suficiente para frenar la avalacha blanca, que con un 2-1 en contra en el minuto 85, dieron la vuelta a la tortilla con los goles de Brahim y el ya mencionado de Bellingham.

Con este resultado, el Real Madrid enfila la eliminatoria frente al City con un buen resultado a favor y cortaba la maldición de no haber ganado nunca en el Etihad, y buscaban dar un lavado de cara a la situación del conjunto blanco, pero, una vez más, las cosas se torcerían de nuevo.
La visita a Pamplona, la guinda del pastel del arbitraje
Cuando parecía que el arbitraje ya iba a pasar a un segundo plano, todo estalló en el partido frente a Osasuna. Munuera Montero fue el nombre propio durante y después del partido, con dos penaltis no pitados a favor del Real Madrid y una roja directa a Bellingham. Con goles de Mbappé y Budimir de penalti, el partido acabó con un 1-1 en el electrónico y con un Real Madrid completamente indignado por el arbitraje.
La acción clave del encuentro fue la roja a Bellingham. Según Munuera Montero, el inglés le gritó a escasos metros “fuck you”, significando un ataque al propio árbitro, lo que condenó con una tarjeta roja en el minuto 39. A pesar de ello, Bellingham ha afirmado en reiteradas ocasiones que no dijo eso, sino que dijo “fuck off”, frase con un significado completamente distinto que cambiaría radicalmente las cosas.
Esto, unido a los dos penaltis no pitados y a la pena máxima anotada por Budimir, hicieron que el Real Madrid volviera a denunciar la actuación arbitral en su partido con un vídeo de casi 5 minutos en Real Madrid TV dedicado exclusivamente a Munuera Montero y a su equipo de árbitros. Estas numerosas actuaciones arbitrales tan criticadas dejan al Real Madrid en un mal lugar tanto en liga como a los ojos de la gente, y la tensiónestá aumentando a medida que pasa el tiempo, quién sabe si puede ir a más.