Endrick Moreira de Sousa, o Bobby para sus compañeros, volvió a demostrar de pleno que cuando Ancelotti lo ofrece confianza, el delantero responde. Otra buena actuación en copa, esta vez en el Reale Arena ante la Real Sociedad. Un muy buen partido del brasileño que constata que está pidiendo paso y más minutos.
El partido global de Endrick en la ida de las semifinales de la Copa del Rey fue redondo. Primero por anotar otro gol, que vale una ventaja importantísima para su equipo. Y segundo por su gran actuación, con un remate al travesaño que hizo temblar San Sebastián, y muchas acciones de jugador con mucha clase.
Endrick: Escuchar, aprender, y rendir
El joven ariete hizo caso a las palabras de Carlo en la previa del partido, y se puso el mono de trabajo para ofrecer su mejor versión. Él mismo lo admitió tras el encuentro: “Siempre he dicho que soy un trabajador y tengo que trabajar. Cuando tengo la oportunidad, lo hago.” Y vaya que lo hizo. Endrick se dejó todo en el campo, muy participativo, con ganas de ayudar en defensa, y de crear peligro merodeando el área rival. Pero además de todo eso el brasileño tiene de serie su espíritu de killer. Algo que volvió a demostrar ante los txuriurdines, en una gran acción colectiva de trabajo y talento, Vinicius recuperó, Bellingham creó, y Endrick finiquitó.
Es el cuarto gol del brasileño en Copa, empatado con Julián Álvarez como máximos goleadores de la competición. Y es su sexto gol en toda la temporada con el Real Madrid, una cifra nada mala teniendo en cuenta que apenas ha arrancado cuatro partidos como titular en todo el curso. El madridista anota un gol cada 71′, números de auténtico crack.
Mente de ganador nato
Endrick: “Estoy un poco enfadado con el larguero porque lo podía hacer mejor. Fallando y mirando puedo mejorar. Contento con el gol.”
Lo claro es que Endrick tiene confianza en sí mismo. Ya lo demostró al inicio de la temporada cuando en un par de acciones se atrevió a disparar desde el centro del campo. Una le salió, y la otra no, algo que le costó alguna reprimenda de Carlo. Pero el 16 merengue no se arruga, y es muy autoexigente para seguir creciendo como futbolista.
Endrick es el claro ejemplo de que la mejor manera de revertir una situación negativa es con trabajo y actuaciones sobre el verde. De momento el delantero ya le ha dado una victoria muy importante a los blancos. Y, quién sabe si, a partir de ahora, Carlo le tiene más en cuenta durante los partidos.
