Este Barça muerde en Europa. El FC Barcelona ha desplegado un fútbol demoledor en la Champions y ya suma 36 goles en el torneo. Son el equipo más goleador de la competición con un promedio de 3,28 goles por partido. Su última víctima: el Borussia Dortmund, arrollado por 4-0 en Montjuïc. Entre registros rotos, nombres propios y un nuevo ídolo emergente, los culés ya no sueñan con semifinales: las quieren.
Lewandowski y Raphinha, más que Messi y Neymar
Lo que empezó como una sociedad puntual se ha convertido en una alianza histórica: Robert Lewandowski y Raphinha han superado juntos los registros que en su día firmaron Messi y Neymar en la temporada 2014/15, una de las más gloriosas de la historia azulgrana, demostrando que este Barça muerde en Europa.
Con los dos goles del polaco y el tanto inicial del brasileño ante el Dortmund, la pareja suma ya 23 goles combinados en esta edición de Champions (Lewandowski 11, Raphinha 12), superando los 20 que lograron Messi (10) y Neymar (10) en aquella temporada donde terminaron levantando la orejona.
Más allá de los números, el entendimiento entre ambos fue evidente en el Estadi Olímpic. Raphinha asistió en el segundo gol a Lewandowski con un pase quirúrgico, y el polaco respondió con movimientos que arrastraron marcas para liberar espacios al brasileño. En un Barça históricamente asociado al juego coral, esta dupla está escribiendo su propia leyenda: la del instinto. A todo esto hay que sumarle la perla de la corona, Lamine Yamal. Estos números no se podrían entender sin la magia del canterano culé.
Fermín López, el pulmón que lo cambia todo
En un equipo plagado de estrellas consagradas, Fermín López brilla con luz propia por su madurez precoz y su capacidad para brillar dentro del caos con una sola pausa. En la goleada ante el Borussia Dortmund, el joven de El Campillo volvió a ser el vértigo del centro del campo, ese jugador que, sin levantar la voz, marca el tempo y decide cuando activar las jugadas.
Sus números en la presente edición de la Champions no hacen más que respaldar la sensación visual: ha disputado 322 minutos en ocho partidos, con una efectividad de pase del 84,25%, aportando fluidez, seguridad y criterio en cada toque. Además, ha recorrido ya 34,28 kilómetros en el torneo, un jugador sacrificado y siempre activo en la fase defensiva.
¡Gran p🅰️rtido, Fermín! 👏 pic.twitter.com/QXuFAD8J7o
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) April 10, 2025
Pero más allá de los datos, Fermín ofrece algo que no se mide: intuición táctica, valentía en la conducción y sangre fría en los metros finales. Su fútbol es una mezcla entre el ADN clásico del Barça y una energía renovadora que contagia. Cada intervención suya transmite orden, cada movimiento mejora al compañero. Si el Barça ha recuperado su pulso competitivo en Europa, es en parte gracias a jugadores como él: jóvenes con cabeza de veteranos y alma de gladiadores.
Se está consagrando como titular tras las continuas lesiones de Dani Olmo y parece que va a ser muy difícil que le saquen del once.