Con 50 partidos al frente, el Barcelona de Flick presenta un balance que supera todas las expectativas, hasta las del más optimista: 38 victorias, 7 empates y solo 5 derrotas, un 78% de efectividad. Más allá de los números, ha recuperado lo más importante, la ilusión culé. Jugadores como Lamine Yamal y Cubarsí ya son indiscutibles, el mediocampo ha encontrado equilibrio con De Jong y Pedri, y la portería ha sido blindada con Szczęsny durante la ausencia de Ter Stegen, además del rendimiento excelso de Lewandowski y Raphinha, quien está seriamente encaminado a un Balón de Oro.
La derrota positiva
En Dortmund, el Barça firmó su peor actuación del año. Cayó 3-1, fue superado en todos los registros del primer tiempo y sufrió durante largos tramos. Pero sobrevivió. Y eso, tratándose de la Champions y del Barcelona de los últimos años, es una victoria en sí misma. El 4-0 de la ida fue demasiado peso para un Borussia que solo pudo maquillar la eliminatoria. El global de 5-3 mete al equipo de Flick entre los cuatro mejores de Europa por primera vez desde 2019. Atrás quedan las pesadillas de Roma, Anfield, Lisboa y Múnich. Este Barça, aún sin brillo, ya no se cae.
Hansi Flick, con su habitual sobriedad, celebró su partido número 50 como técnico culé con una derrota intrascendente. Desde su llegada en verano, el club ha vivido una transformación. Lo que parecía un equipo a la deriva es hoy líder en Liga, finalista de Copa, campeón de Supercopa y semifinalista de Champions. Y todo, con el mejor ataque de Europa.
Un equipo que volvió de la nada
Hay que recordar de dónde viene este Barcelona. En agosto pocos imaginaban este escenario. El fichaje de Szczęsny como recambio de urgencia, las dudas en defensa, la adaptación de los jóvenes, las lesiones. Y sin embargo, el entrenador alemán ha hecho del caos su plan. Ha construido un bloque reconocible, competitivo y con hambre. La estadística lo deja claro, cuatro meses invictos, 22 partidos sin perder hasta este martes, y una producción ofensiva solo igualada por el Manchester City de otros años.
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— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) April 15, 2025
Pero ahora los blaugranas están a solo ocho partidos de lograr algo inédito: convertirse en el primer club en conquistar tres tripletes. El camino no será fácil, pero hay motivos para soñar. Por primera vez en años, el barcelonismo no teme mirar hacia arriba. Son los máximos favoritos a todo.
Los números récord del Barcelona
A falta de, al menos, ocho partidos para el final de la temporada, sin contar una posible final de Champions, los números de Flick ya le permiten estar a la altura de las mejores campañas de la historia reciente del club. Con 147 goles en 50 partidos, su equipo está a solo 11 de los 158 que firmó el Barça de Guardiola en 2008/09 y a 28 de los 175 que logró Luis Enrique en 2014/15. Pero además, el alemán ha mejorado el porcentaje de victorias de Pep en su primer año, con un 78 % frente al 74,7 % del catalán. También ha mostrado una capacidad notable de mantener la consistencia, entre enero y abril, el equipo encadenó 24 partidos sin perder, 20 victorias y 4 empates.
Lo que le queda al Barcelona
En este tramo final, el Barcelona se juega mucho más que títulos, puede convertirse en el primer club de la historia en lograr tres tripletes. Le restan siete partidos de Liga, entre ellos un Clásico en casa en la jornada 35 y visitas exigentes como San Mamés o el derbi ante el Espanyol. Antes disputará la final de la Copa del Rey ante el Real Madrid, el sábado 26 de abril, y las semis europeas. El calendario es exigente, pero también propicio, cuatro de esos encuentros serán en Montjuïc, donde los de Flick han sido especialmente sólidos. A diferencia de otras temporadas recientes, el equipo llega al desenlace con estructura, fondo físico y automatismos.
