En pleno mediodía del 21 de junio de 2025, el Borussia Dortmund tenía la estrategia contra el calor perfecta. El desafió no era solo su rival sudafricano, el Mamelodi Sundowns, sino también a un enemigo invisible y poderoso: el sol inclemente de Cincinnati, con temperaturas que superaron los 32 °C.
Frente a este calor sofocante, el técnico Niko Kovač tomó una decisión inédita: sus jugadores suplentes no se sentaron en el banquillo. En su lugar, observaron la primera parte desde… el vestuario, gracias a una televisión instalada para la ocasión. Un gesto poco habitual, pero que se justificó por las condiciones extremas, evitando riesgos de agotamiento o golpes de calor. La estrategia contra el calor estaba preparada.
Our subs watched the first half from inside the locker room to avoid the blazing sun at TQL Stadium – never seen that before, but in this heat, it absolutely makes sense. 🥵 #FIFACWC pic.twitter.com/5GYtMER1fQ
— Borussia Dortmund (@BVB) June 21, 2025
Ya en la segunda mitad, los cambios no solo llegaron al equipo, sino también al entorno: los futbolistas volvieron al banquillo cargando sombrillas, improvisando sombra bajo el sol que aún exigía precauciones . Además, el club colocó un enorme ventilador y toneladas de hielo en la banda, una imagen que despertó la atención de todos.
El portero Gregor Kobel, incómodo ante el revuelo montado por la ola de calor, lanzó un mensaje directo: “Es verano, y el fútbol también se juega en verano. Tenemos que adaptarnos”. A su lado, Kovač subrayó que en esta Copa del Mundo de Clubes ganará quien mejor gestione el calor, los viajes y las condiciones del césped. El plan funcionó: a pesar del calor, el Dortmund ganó por 4‑3, con un gol decisivo del joven Jobe Bellingham, y sumó tres puntos vitales en su grupo.
Calor extremo en el Mundialito
La estrategia de Dortmund ha encendido el debate entre rivales y aficionados. No es habitual ver a un equipo relegando a sus suplentes al vestuario durante una fase oficial. Pero en este nuevo formato de la Copa, con partidos al mediodía en plena ola de calor, la salud está por encima de lo convencional.
El club alemán no fue el único: algunos encuentros fueron interrumpidos para hidratación, y se han visto jugadores luchando con el sol sin protección alguna. Incluso el Bayern y otros clubes han expresado su preocupación ante condiciones que rozan lo extremo, alertando de los efectos del clima en jugadores y el calendario futuro .