La Federación Inglesa de Fútbol (FA) ha acusado al Chelsea de 74 infracciones graves en el manejo de traspasos entre 2009 y 2022. Las irregularidades, que se centran en pagos a agentes, el uso de intermediarios y la inversión de terceros en jugadores, ocurrieron principalmente durante la propiedad de Roman Abramovich como dueño del club, entre las temporadas 2010-11 y 2015-16. La FA detalla violaciones específicas a sus regulaciones: las normas J1 y C2 sobre agentes de fútbol, las A2 y A3 para trabajar con intermediarios, y las A1 y B3 en inversiones de terceros. De esta manera, el Chelsea podría sufrir distintas sanciones que podrían incluir multas elevadas, restricciones en el mercado de fichajes o incluso puntos restados en la Premier League, aunque la decisión final llegará tras un proceso disciplinario.
El Chelsea es la ‘oca’ del fútbol: de lío en lío y tiro porque me toca
El club londinense se encuentra, una vez más, en el ojo del huracán. Las acusaciones surgen de una investigación que el mismo Chelsea impulsó al descubrir irregularidades durante la due diligence de la compra estadounidense del club en mayo de 2022. Los nuevos propietarios, encabezados por Todd Boehly y Clearlake Capital, identificaron varios datos financieros incompletos y posibles brechas en las normas de la FA. Inmediatamente después de la adquisición, el club notificó esto a las autoridades y cooperó plenamente, proporcionando acceso total a los archivos históricos que abarcan más de una década.
La FA ha confirmado las 74 acusaciones y le ha dado al club una semana, hasta el 19 de septiembre, para presentar su defensa. Este plazo permite abrir la puerta a un debate más allá del fútbol, ya que el Chelsea argumenta que las infracciones datan de la era Abramovich, sancionado por el gobierno británico en 2022 por vínculos con el régimen ruso.
Más de 1.000 millones de euros invertidos desde 2022
El impacto de esta sanción podría ser muy duro para un Chelsea que ha invertido más de mil millones de euros en fichajes desde 2022. Mientras tanto, los aficionados en las redes sociales han comparado esta situación con la prohibición de fichajes en 2019 por diferentes irregularidades menores. La FA está decidida a reforzar la integridad del fútbol inglés y tiene clara una cosa: nadie está por encima de las reglas. Ni siquiera aunque tengas dinero.
