Messi vs. PSG: la revancha que no estaba en los planes

En Atlanta, el argentino enfrentará por primera vez a los parisinos desde su marcha del club
Messi en el Inter Miami

El Mundial de Clubes 2025 ofrecía promesas de espectáculo, pero, hasta ahora, ninguno de sus cruces tuvo tanta carga simbólica como el que se avecina en octavos de final. Inter Miami frente al Paris Saint-Germain. No es sólo el campeón de Europa contra el invitado inesperado. Es Messi contra su último club. Los estadounidenses no lograron quedarse con el primer puesto del Grupo A. El empate 2-2 ante Palmeiras, tras ir 2-0 arriba, los dejó segundo y les cruzó en el camino al PSG de Luis Enrique. Un destino caprichoso, casi literario. Porque ahora Messi tendrá delante al equipo que supo vestir su camiseta pero jamás le permitió sentirse en casa.

Será el primer enfrentamiento de Messi contra el PSG desde que dejó París en 2023. Dos años después de su llegada al Parque de los Príncipes, con 32 goles, 34 asistencias y tres títulos, el vínculo entre el rosarino y el club francés terminó en un divorcio frío. Silbidos, críticas de la prensa local, una suspensión por un viaje a Arabia y una frase de las que no suele dejar el ’10’: “Fui el único jugador de la Selección que no tuvo un reconocimiento en su club”, dijo tras consagrarse campeón del mundo con Argentina en Qatar.

La herida no cicatrizó. Y ahora, desde Inter Miami, Messi tiene la chance de cobrarse una revancha. El reencuentro con sus excompañeros ya ocurrió en octubre de 2023, cuando recibió su octavo Balón de Oro en París. Pero esta vez no será en una gala, sino sobre el césped del Mercedes-Benz Stadium de Atlanta, donde buscará que hable el fútbol.

Este cruce también reúne una galería de nombres con pasado azulgrana. Luis Enrique, Mascherano, Jordi Alba, Luis Suárez y Sergio Busquets. Todos excompañeros, ahora separados por camisetas y momentos de la vida. El técnico del PSG fue pieza clave en la evolución táctica de Suárez y dejó huella en muchos de ellos.

Luis Enrique me inyectó un ADN competitivo. Me cambió la forma de jugar”, dijo el uruguayo. Alba lo llamó directamente “el mejor entrenador del mundo”. Mascherano, desde el banco de Inter Miami, lo definió como “un amigo con una relación muy especial”. Pero en el campo no habrá lugar para sentimentalismos.

El técnico de las Garzas no disimula lo especial del cruce: “Nos enfrentamos al mejor equipo de Europa”, reconoció, pero dejó caer una frase que resume su esperanza: “Para nosotros, mejor si Messi juega enojado. Cuando tiene algo entre ceja y ceja, da un plus”.

El capitán argentino, que lleva 51 goles con la camiseta de Inter Miami, viene de convertir ante Porto en la fase de grupos y está en un gran momento. Su sociedad con Suárez, la fiabilidad de Busquets y los destellos de jóvenes como Segovia o Cremaschi armaron una estructura que, aunque frágil en defensa, tiene argumentos para competir.

Del otro lado, el campeón de la Champions League se presenta con su arsenal completo. Luis Enrique ha logrado darle al PSG una identidad más reconocible, basada en la presión alta, posesión paciente y una versión increíble de Vitinha. Pero si hay algo que este Inter Miami ya demostró es que, en el caos, sabe hacer daño.

El domingo 29 de junio, Messi saldrá a la cancha con el 10 de Inter Miami. Enfrente, el escudo del club que no lo entendió. Y tal vez, sin decirlo, busque cerrar ese ciclo con el lenguaje que mejor maneja, el del fútbol. Como tantas veces, con la pelota como aliada, el argentino escribirá otro capítulo.

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