Tras un ajetreado fin de semana para ambos equipos, los dos últimos campeones de la Champions League se vuelven a enfrentar. Este encuentro dejará a uno de ellos fuera de la presente edición de la competición. Mientras que el Manchester City viene de endosarle un contundente 4-0 al Newcastle con un pletórico Marmoush, el Real Madrid está envuelto de nuevo en las polémicas arbitrales tras el 1-1 en su visita a Pamplona.
Buenas noticias para la zaga del Real Madrid
Tras la confirmación de @miguelitocope, ya se sabe que Antonio Rüdiger está de vuelta de su lesión y estará disponible para el partido de este miércoles. Aunque el retorno del alemán siempre es una buena noticia para los blancos, al cuerpo técnico les inquieta una posible recaída. A pesar de ello, es probable que Ancelotti acabe alineando a Rüdiger como titular. Ahora la cuestión es, ¿Quién sería el que le acompañaría en la defensa? La decisión está en elegir entre Tchouaméni y Asencio.
Por juego, el que está cada vez mejor es el canterano, se está consolidando como un central de garantías y Luis de la Fuente ya le ha echado un ojo. Por el otro lado, el francés ha mejorado notablemente su juego en la posición de central tras las duras críticas que recibió hace semanas. A pesar de ello, no acaba de sentirse cómodo ya que esa no es su posición natural.
Hay que tener en cuenta que Ancelotti siempre se decanta por poner por delante los galones, y en este caso el beneficiado de ello sería Tchouameni. Habrá que esperar al encuentro para ver quiénes formarán la pareja de centrales frente al Manchester City.
Marmoush, el francotirador que apunta al Bernabéu
En el otro lado de la balanza, el City ha desencadenado a una bestia. En el encuentro que disputaron este sábado frente al Newcastle, el flamante nuevo fichaje Omar Marmoush anotó un hat-trick en tan solo 14 minutos. El egipcio no había anotado todavía con la camiseta de los citizens, pero ya se ha quitado ese peso de encima, y de qué manera.
Hay que tener en cuenta que Marmoush no disputó ni 10 minutos en la ida contra el Real Madrid, quién sabe si es el as bajo la manga de Guardiola para revertir el resultado global. De lo que no hay duda es que ‘la momia’ está deseando envolver el Bernabéu.
Recordatorio de la intensa ida en el Etihad
La primera parte de esta eliminatoria no dejó a nadie indiferente. Fue un partido frenético, tal y como tienen acostumbrados ambos equipos a los aficionados cada vez que se enfrentan. El partido comenzó con un Real Madrid obcecado con el gol, lanzando repetidamente una serie de ofensivas. A pesar del dominio madridista, el City aprovecharía un contrataaque en el que Grealish filtró un balón al área que bajaría Gvardiol con el pecho para que Haaland definiera a placer.
A pesar del temprano gol de Haaland en el minuto 19, el Real Madrid volvió a asediar el encuentro, pero se marchó al descanso con un 1-0 en el electrónico.
Ya en el minuto 60, los ataques madridistas obtuvieron su fruto. Dani Ceballos envió un centro a través de la defensa ‘citizen’ directo a la bota de Mbappé, quien definiría con una volea un tanto rocambolesca. Ese disparo fue suficiente como para batir a Ederson y logró poner las tablas en el marcador.
Cuando apenas quedaban 10 minutos del tiempo reglamentario, Clement Turpin señaló la pena máxima en el borde del área de Real Madrid por una falta de Ceballos. Sería el propio Haaland quien asumiría la responsabilidad y anotaría de nuevo para adelantar a los de Guardiola.
En el minuto 85, el Real Madrid enfilaba el final del partido con un desfavorable 2-1. Tras un rechace de un tiro de Vinicius, Brahim pescaría en río revuelto y empataría de nuevo el encuentro. El marroquí pidió perdón al anotar el gol ya que el Manchester City es su exequipo.
Cuando el descuento del partido llegaba a su fin, una vez más emergería la figura de Vinícius. Tras un eslalon, elevaría el balón por encima de Ederson para que Bellingham solo tenga que empujar el balón para firmar una épica remontada en Champions.
Tras la trepidante ida que dejaron ambos equipos en la retina de los aficionados, las expectativas para el partido de mañana son muy altas. Con un City y un Marmoush revolucionados tras el 4-0 al Newcastle y un Real Madrid con sed de venganza tras lo vivido en Pamplona, ninguno se quiere quedar fuera de Champions y el partido promete no defraudar a los espectadores.
