El club lisboeta apunta a ser uno de los equipos revelaciones del Mundial de Clubes que arranca esta semana en Estados Unidos. Al Benfica le corresponde una plaza en el torneo por su gran rendimiento en la Champions League en los últimos años.
Con el inicio del primer Mundial de Clubes ampliado a 32 participantes a la vuelta de la esquina, el Benfica se prepara para competir entre la élite del fútbol internacional. El conjunto lisboeta, único representante portugués en el torneo, ha accedido a la competición a través del ranking UEFA, que premia a los equipos con mejor trayectoria en la Champions League entre 2021 y 2024.
Durante ese periodo, el Benfica firmó campañas europeas muy destacadas: alcanzó los cuartos de final en 2022 y 2023, superó fases de grupos exigentes y sumó puntos clave que le situaron por delante de otros clubes con mayor presupuesto. Esa regularidad le permitió entrar en el selecto grupo de ocho clubes europeos no campeones que acceden al torneo por méritos acumulados, junto a nombres como el PSG, el Inter o el Atlético de Madrid.
El torneo se celebrará en distintas ciudades de Estados Unidos entre junio y julio, y reunirá a 32 equipos de todas las confederaciones, incluyendo campeones de Champions League, Libertadores, la Champions de América y otros torneos continentales. El nuevo formato busca consolidarse como la gran cita cuatrienal del fútbol de clubes, con una estructura similar a la Copa del Mundo de selecciones. Y el Benfica quiere dar la sorpresa y llegar lejos en la competición.
¿A qué puede aspirar este Benfica?
Para el Benfica, esta participación es más que un premio: es una oportunidad de aumentar su proyección internacional, generar ingresos extraordinarios y competir cara a cara con los gigantes del fútbol global. El club llega con una plantilla equilibrada, un bloque consolidado bajo la dirección técnica de Roger Schmidt y figuras como Álvaro Carreras, Renato Sanches o Ángel Di María como referentes.
En Lisboa, la expectación es máxima. La afición rojiblanca confía en que el equipo pueda dejar huella en un torneo que marcará un antes y un después en la historia reciente del club. El Benfica comparte grupo con el Chelsea, el Palmeiras y un representante asiático, y ya prepara su debut con la ambición de avanzar a las fases eliminatorias.
La FIFA, por su parte, ha destacado el papel del club portugués como ejemplo del éxito del modelo de clasificación por coeficiente. El organismo valora que equipos como el Benfica, sin títulos europeos recientes pero con un rendimiento sostenido, puedan estar presentes en una cita de esta magnitud, aportando diversidad y competencia real.