Con una semana para lamerse las heridas tras la dura derrota ante el Rayo Vallecano, el RC Celta de Vigo se prepara para visitar el Coliseum con el objetivo de sellar su clasificación europea. Los vigueses en este momento son séptimos clasificados con 52 puntos, uno por delante de Rayo Vallecano y CA Osasuna, por lo que dependen de sí mismos para lograr el objetivo.
Las matemáticas
Para los de Giráldez las cuentas salen bastante fácil, si ganan a un Getafe CF ya salvado serán equipo de Europa League. Sin embargo, hay una serie de combinaciones a tener en cuenta que pueden marcar el futuro de los vigueses.
En caso de empate, sólo le valdría que no ganen ni Rayo ni CA Osasuna para sellar el pase a la segunda máxima competición. En caso de que alguno de los dos ganase, los celtiñas se tendrían que conformar con la Conference League.
Si el Celta cayese en Getafe, se pondría todo cuesta arriba para los gallegos. En caso de triple empate a puntos serían los de Giráldez los que se quedarían sin competición europea, sin embargo, si el empate a puntos se diese sólo con CA Osasuna, sería el Celta quién acabaría por delante.
Larga travesía por el desierto
Han pasado ocho años desde que aquel Celta de Berizzo maravilló a toda Europa y representó como muy pocos al fútbol español. Aquella noche, un grupo de chavales como dijo Iago Aspas, estuvieron a punto de completar una machada histórica y eliminar al Manchester United de José Mourinho en Old Trafford.

Desde entonces, varios años vagando por el campeonato doméstico sin apenas indicios de fuesen a volver aquellos años, coqueteando de manera muy seria con el descenso, y tocando fondo el año del centenario con el pésimo paso de Rafa Benítez
La llegada de Claudio
La llegada del técnico gallego supuso un soplo de aire fresco para el Celta de Vigo y para todo el celtismo. Tras la pérdida de identidad con Benítez, Claudio supo devolverle la ilusión a Balaídos y crear de nuevo esa conexión entre grada y césped que tanto ha caracterizado a los vigueses a lo largo de su historia.
Durante este curso, Claudio ha utilizado a 14 canteranos de manera asidua, siendo muchos de ellos titulares indiscutibles en el once. Además, ha demostrado ambición en el discurso y esto se ha visto reflejado en el terreno de juego como pocas veces se ha visto en Vigo, un claro ejemplo de esto, son las remontadas durante este curso.

Por todo esto, y muchos intangibles más, el RC Celta sueña con volver a viajar por el viejo continente siete años después.