El Mundial de Clubes 2025 ya está aquí. Por primera vez, 32 equipos se verán las caras en un torneo que se asemeja más a un Mundial de selecciones que al viejo formato. Entre ellos, un nombre que quizá no suena tan alto en Europa, pero que en Asia es palabra mayor: Ulsan HD FC.
El campeón surcoreano aterriza en Estados Unidos con ambición y sin complejos. Clasificado por méritos propios tras conquistar la Liga de Campeones Asiática 2020 y mantener un alto rendimiento en años posteriores, Ulsan es uno de los cuatro representantes asiáticos y el único club coreano en el torneo.
Grupo F, zona caliente
Y no les ha tocado un grupo fácil: Fluminense, actual campeón de la Libertadores; Borussia Dortmund, subcampeón de la Champions League 2024; y Mamelodi Sundowns, el mejor equipo africano de la última década. Un grupo durísimo, pero ideal para dejar huella.
Su debut será el 18 de junio ante los sudafricanos en Orlando, a las 7:00 hora coreana (00:00 hora peninsular). Después vendrán los choques de alto voltaje ante Fluminense (22 de junio) y Dortmund (26 de junio). Avanzan los dos mejores a octavos.
Sin estrellas, pero motivados
El técnico Kim Pan-gon, quien asumió el banquillo en 2024 tras dirigir a la selección de Malasia, lo tiene claro:
“No somos favoritos, pero venimos a competir. Un buen resultado no sería una sorpresa, sino el reflejo del trabajo de todo un país”.
Ulsan no tiene grandes estrellas mediáticas, pero sí un bloque sólido. Su base está compuesta por jugadores locales, con algunos nombres destacados como el central Kim Young-gwon (ex Gamba Osaka y habitual en la selección coreana) y el joven talento Lee Dong-gyeong, que regresa tras su paso por Alemania.
El club ya sabe lo que es jugar el Mundial de Clubes, aunque sin fortuna: 6º puesto en 2012 y 2020. Pero ahora la historia es distinta. El nuevo formato permite más margen, y clasificarse a octavos sería una auténtica gesta para el fútbol coreano. Ulsan HD no parte como favorito, pero si algo ha enseñado este torneo, es que los clubes asiáticos siempre tienen algo que decir. Y si hay algo que no falta en este equipo, es hambre.