Este partido marcará un duelo directo por Europa entre equipos de mitad de tabla. Décimo contra decimoprimero, se enfrentarán durante noventa minutos en una lucha con vistas a poder meterse en puestos de competiciones europeas. La Real Sociedad buscará asaltar el campo de un Rayo Vallecano que se agranda ante su afición.
Un Rayo Vallecano cerca de Europa
Los de Iñigo Pérez están demostrando año tras año que es un equipo que sabe competir, capaz de plantar cara a cualquier plantilla de la liga, y esta temporada es el claro ejemplo. Los de Vallecas están haciendo de su estadio un fortín digno de pocos equipos en esta liga. En lo que llevamos de temporada el Rayo únicamente ha perdido cuatro partidos como local, lo que habla muy bien del estado de forma del equipo en su casa. El Barcelona ha sido el único equipo capaz de ganar en Vallecas de los tres gigantes de la liga. El Atlético de Madrid no pasó del empate a uno, mientras que con el Real Madrid los de Iñigo Pérez los pusieron al límite, con un empate a 3-3 que tuvo que rescatar el conjunto blanco.
La Real Sociedad está en horas bajas
Los donostiarras estas últimas semanas están viendo como la exigencia de ser un equipo europeo, con todo lo que conlleva, les está pasando factura. El conjunto txuri-urdin ha tenido como rivales al Sevilla, Barcelona, Real Madrid y Manchester United por partida doble en los últimos cinco partidos, en tan solo dos semanas y media. Dos semanas que los aficionados vascos desearían borrar de su memoria, pues no han conseguido ganar ninguno de los cinco partidos disputados. Con la derrota de Old Trafford aún presente, la Real llegará a Vallecas con el cuchillo entre los dientes. Este partido es un duelo directo por Europa, y el conjunto vasco lo sabe, por lo que este partido es la oportunidad perfecta para resarcirse y asegurarse de jugar competición europea la siguiente temporada.
Enfrentamientos directos
Esta temporada ambos conjuntos se han enfrentado en dos ocasiones. El primer partido tuvo lugar en el Reale Arena por la primera jornada de la competición liguera, donde los madrileños se impusieron por 1-2. Los donostiarras se tomaron la revancha cuatro meses después, esta vez en Copa del Rey. El partido terminó 3-1 para los txuri-urdin, eliminando así a los de Iñigo Pérez de la competición.
